El origen de estos cambios tiene un trasfondo que nace desde el mal ambiente y las fuertes opiniones por el funcionamiento deportivo en el primer Split. Las expectativas generadas alrededor del equipo de Jijantes fue su peor enemigo.
La crónica del paso de Jijantes en la Kings League debe empezar con la presencia de Gerard Romero en las pruebas físicas y futbolísticas de los jugadores del Draft. El involucramiento de todo el staff de Jijantes dio la impresión de que tendrían muy controlado el inicio de en ese entonces una competencia sin precedentes. Incluso, el liderazgo de Marc Carmona y su carrera lo posicionaba como el mejor técnico en la previa. Un campeón de Europa en fútbol sala, un deporte cercano al fútbol 7 de la liga.
Como lo que parecía un alineamiento de los planetas, tuvo suerte por parte del azar en las elecciones del Draft. Tuvo el pick 2, lo que significó una oportunidad para llevarse a uno de los mejores prospectos del torneo. Lluís Alsina sin duda era el más talentoso de sus jugadores, no solo por su capacidad, sino porque relució ante tanto gris de sus compañeros.
Los dirigidos por Marc Carmona tuvieron que convivir con ‘la gota china’. Cada mal partido, cada desvanecimiento en medio de los encuentros que le remontaron y las pobres actuaciones de sus jugadores era más doloroso por el fuerte achaque en las redes sociales. Debido a la exposición mediática y las hirientes reacciones en programas y cuentas que cubren la liga hubo necesidad de trabajo psicológico y tratamiento mental.
El presidente del club tuvo que reafirmar la permanencia del técnico catalán, señal del mal ambiente alrededor de la institución. Lo confirmó incluso para el segundo split, pero como bien dijo el presidente y periodista, no iban a cometer los mismos errores del pasado. Marc Carmona deja de ser entrenador de Jijantes FC
La pésima temporada del equipo en el split de invierno no podía aguantar un mal inicio en el presente. Jijantes tenía una oportunidad idónea con referencia a los movimientos del mercado de fichajes, se enfrentaba al equipo menos valorado por la generalidad de los seguidores de la liga, 1K FC. Aunque en este deporte nada se gana en la previa, fue un golpe fuerte la derrota 5-3, no solo por lo mencionado anteriormente, sino porque era la reaparición del fantasma que terminó con una última posición y una única victoria.
Una decisión muy cuestionada por la afición son los pocos minutos de los que dispuso Uri Pons en ese primer partido. El delantero de Jijantes llegaba como una de las grandes estrellas y apenas disputó 8 minutos en todo el encuentro.
En el entorno de Gerard Romero nadie duda de su calidad como entrenador, simplemente, ambas partes, piensan que el formato de la Kings League no es para Marc Carmona. El factor de los dados y las cartas es algo a lo que el mister nunca se acostumbró.
Esta derrota fue la gota que mató al hombre. El cambio era una salida entre varias, una era rodearlo de un equipo técnico que trabajase las debilidades o llamar a la ‘Calma Kounde’ y continuar el split con Marc Carmona en gesto de confianza. Pero los hechos hablan por Jijantes, un ‘timonazo’ y rehacer un proyecto en medio de la competencia es lo mismo que decir, no tenemos nada que perder, vamos a intentar algo diferente.
Y las derrotas no solo cobraron el puesto de Marc Carmona, también se busca evitar una presentación accidentada en la Queens League. El segundo anuncio de la jornada fue la salida de Paula Gonu como presidenta de Jijantas, y en la misma línea que la sustituta fuese Lisbeth Cid. Ahora la dirección y ojos se tienen que dirigir a la familia Romero Cid. El control y estar de cerca con todo lo que suceda en los equipos significa que no quieren, otra vez, recurrir al ‘Hemoal’, por delante, por detrás y por todos lados.
Paula Gonu fue muy criticada por parte de la afición. Consideraban que su implicación no estaba al nivel requerido para una competición con el impacto que genera la Queens League. Varios vídeos en los que se la ve totalmente fuera del mínimo conocimiento de la Kings no gustaron al aficionado jijante.